sábado, agosto 30, 2003
Los twist
Básico y letal (Basic, Estados Unidos, 2003). Dirigida por John McTiernan. Con John Travolta, Connie Nielsen y Samuel L. Jackson. Ficha técnica
ESTRENO
Puntaje: 7
Warning: Esta crítica contiene varios "spoilers" que pueden afectar el disfrute de la película y de los que es imprescindible hablar, así que es recomendable leerla después de verla. Ah, véanla.
Básico y letal es la película de plot-twists para acabar con las películas de plot-twists, aquel subgénero a veces horrible y a veces no, que se puso de moda con la sobrevalorada Los sospechosos de siempre de Bryan Singer y cuyo mejor exponente tal vez sea la excelente Criaturas Salvajes de John McNaughton. Son películas que se resignifican cada tres minutos debido a una imposible cantidad de vueltas de tuerca, y cuyos finales suelen resignificar más todavía, o directamente negar, lo que se venía contando.
Esto último es exactamente lo que ocurre con Basic. Pero le agrega una capa más, y es la de la autoconsciencia. Si hasta ahí uno pensaba que la película pasaba de vuelta de tuerca disparatada en vuelta de tuerca disparatada de manera terriblemente manipuladora y casi incoherente, es cuando llegamos a ese final divertidísimo y más disparatado todavía -que recuerda al de Nueve reinas y, por consecuencia, al de Casa de juegos de Mamet- que nos damos cuenta que sólo estuvieron jugando con nosotros (tanto los personajes como McTiernan y el guionista James Vanderbilt). Ese final no sólo resignifica (y anula) todo lo que la película venía contando de manera rashomónica, sino que también nos da a entender que sólo estaba riéndose de aquel subgénero twister, que nada era en serio. Por si quedaban dudas, el film termina con un primer plano de Johntra mirando a cámara y haciendo(nos) un gestito de complicidad. Excelente.
Es verdad que Basic es un tanto decepcionante viniendo de John McTiernan, uno de los mejores directores de la actualidad (recordar obras maestras como El último gran héroe, Duro de matar y 13 guerreros, por decir sólo algunas). Algunos momentos no están muy bien filmados -otros si- y hay una inclusión bastante molesta y arbitraria de la excelente canción Natural Blues de Moby. Pero es divertida y simpática (sobre todo luego de una segunda visión), los actores son todos queribles y el final es... bueno... hermoso.
Juan Martínez.
ESTRENO
Puntaje: 7
Warning: Esta crítica contiene varios "spoilers" que pueden afectar el disfrute de la película y de los que es imprescindible hablar, así que es recomendable leerla después de verla. Ah, véanla.
Básico y letal es la película de plot-twists para acabar con las películas de plot-twists, aquel subgénero a veces horrible y a veces no, que se puso de moda con la sobrevalorada Los sospechosos de siempre de Bryan Singer y cuyo mejor exponente tal vez sea la excelente Criaturas Salvajes de John McNaughton. Son películas que se resignifican cada tres minutos debido a una imposible cantidad de vueltas de tuerca, y cuyos finales suelen resignificar más todavía, o directamente negar, lo que se venía contando.
Esto último es exactamente lo que ocurre con Basic. Pero le agrega una capa más, y es la de la autoconsciencia. Si hasta ahí uno pensaba que la película pasaba de vuelta de tuerca disparatada en vuelta de tuerca disparatada de manera terriblemente manipuladora y casi incoherente, es cuando llegamos a ese final divertidísimo y más disparatado todavía -que recuerda al de Nueve reinas y, por consecuencia, al de Casa de juegos de Mamet- que nos damos cuenta que sólo estuvieron jugando con nosotros (tanto los personajes como McTiernan y el guionista James Vanderbilt). Ese final no sólo resignifica (y anula) todo lo que la película venía contando de manera rashomónica, sino que también nos da a entender que sólo estaba riéndose de aquel subgénero twister, que nada era en serio. Por si quedaban dudas, el film termina con un primer plano de Johntra mirando a cámara y haciendo(nos) un gestito de complicidad. Excelente.
Es verdad que Basic es un tanto decepcionante viniendo de John McTiernan, uno de los mejores directores de la actualidad (recordar obras maestras como El último gran héroe, Duro de matar y 13 guerreros, por decir sólo algunas). Algunos momentos no están muy bien filmados -otros si- y hay una inclusión bastante molesta y arbitraria de la excelente canción Natural Blues de Moby. Pero es divertida y simpática (sobre todo luego de una segunda visión), los actores son todos queribles y el final es... bueno... hermoso.
Juan Martínez.